Familia

NIÑOS: PELEAR Y MORDER

Todas las personas tienen sentimientos de agresividad. Como adultos, nosotros aprendemos a controlar esos sentimientos. Sin embargo, los niños, a menudo demuestran agresividad física—ellos dan, muerden y arañan a otros. Este comportamiento es relativamente común y a menudo aparece cuando el niño cumple un año. Los padres se esfuerzan tratando de manejar el comportamiento agresivo y/o destructivo de su niño.

Si bien puede ser parte del desarrollo normal morder de vez en cuando, el morder persistentemente es una señal de que el niño tiene problemas emocionales o del comportamiento. Mientras que muchos niños pelean ocasionalmente con otros o les dan, la agresión física frecuente y/o severa puede significar que el niño tiene serios problemas emocionales o del comportamiento que requieren una evaluación e intervención profesional. La acción de pelear o morder persistentemente cuando el niño asiste al cuidado diurno o al sistema escolar puede ser un problema serio. A esa edad los niños tienen mucho contacto con sus pares y se espera que ellos sean capaces de hacer amigos y llevarse bien con ellos.

La Accion de Morder

Muchos niños comienzan a morder agresivamente entre la edad de uno a tres años. La acción de morder puede ser la manera por la cual el niño esté probando su poder para llamar la atención. Algunos niños muerden porque se sienten infelices, ansiosos o celosos. Algunas veces esta acción puede ser resultado de una disciplina excesiva o severa o por haber estado expuesto a la violencia física. Los padres deben recordar que los niños que están echando dientes pueden morder también. La acción de morder es la razón más común por la cual son expulsados de los lugares de cuidado diurno.

Que Hacer:

  • De inmediato dígale “no”, en un tono calmado pero firme y con desaprobación.
  • Al bebé que comienza a caminar (de 1-2 años), cárguelo firmemente o póngalo abajo.
  • Al niño pequeño (de 2-3 años) dígale, “no es correcto morder porque le hace daño a las personas”.
  • NO muerda al niño para mostrarle cómo se siente cuando lo muerden. Esto le enseña un comportamiento agresivo al niño.
  • Si el niño persiste en su comportamiento de morder a otros, trate una consecuencia negativa. Por ejemplo, no cargue o juegue con el niño por espacio de cinco minutos después que el/ella haya mordido.

Si éstas técnicas o intervenciones no son efectivas, los padres deben de hablar con su médico de familia.

La Acción de Pelear y de Darle a Otros

Los pequeños y los niños de edad preescolar a menudo se pelean por los juguetes. Algunos niños son premiados involuntariamente por su comportamiento agresivo. Por ejemplo, puede que un niño empuje a otro niño, tirándolo al piso y quitándole su juguete. Si el otro niño llora y se aleja, el niño agresivo se siente victorioso ya que consiguió el juguete. Es importante identificar si este patrón está ocurriendo en los niños agresivos.

Qué Hacer:

  • Es más efectivo si se interviene antes de que el niño comience a mostrar un comportamiento agresivo. Por ejemplo, intervenga tan pronto ve que el niño está muy frustrado o se está alterando.
  • Cuando los niños pequeños pelean a menudo, supervíselos más de cerca.
  • Si el niño le da a otro niño, de inmediato separe los dos niños. Luego trate de consolar y atender al niño que ha sido golpeado.
  • Al bebé que comienza a caminar (de 1-2 años) dígale, “No se dá. Duele cuando das”.
  • Al niño pequeño (de 2-3 años) dígale, “Yo sé que tienes coraje, pero no des. Cuando das duele”. Esto comienza a enseñarle empatía a su niño.
  • NO le dé al niño si le está dando a otros. Esto le enseña al niño a usar comportamiento agresivo.
  • Los padres no deben de ignorar o menospreciar las peleas entre hermanos.

Cuando las peleas son frecuentes, esto puede ser una señal de que el niño tiene otros problemas. Por ejemplo, puede estar triste o alterado, tener problemas controlando el coraje, haber sido testigo de violencia o puede haber sido la víctima de abuso en el cuidado diurno, en la escuela o en el hogar.

Las investigaciones han demostrado que los niños que son físicamente agresivos a temprana edad tienen la tendencia a continuar dicho comportamiento cuando son mayores. Los estudios también han demostrado que los niños que son expuestos a la violencia y la agresión repetidamente en la televisión, los videos y las películas actúan de manera más agresiva. Si un niño pequeño tiene problemas persistentes con la acción de pelear y de morder o exhibe un comportamiento agresivo, los padres deben de buscar la ayuda profesional de un psiquiatra de niños y adolescentes o de otro profesional de la salud mental que se especialice en la evaluación y tratamiento de los problemas del comportamiento en los niños pequeños.

 

Fuente: http://www.aacap.org

Comparte: